- Para tener la posibilidad de estudiar en universidades de Estados Unidos.
- Porque multiplica las horas de aprendizaje en inglés del alumno.
- Porque prueba la capacidad del diplomado para trabajar en ambientes multiculturales y diferentes a su entorno habitual, habiendo desarrollando su capacidad de adaptación y flexibilidad, cualidades indispensables para los profesionales del futuro.
- Porque poder cursar materias y asignaturas a las que normalmente no tendrían acceso los alumnos, supone un gran enriquecimiento académico.
- Porque el hecho de poseer un diploma estadounidense evita tener que superar exámenes como el TOEFL, que garantiza a una universidad que el candidato posee el nivel requerido de inglés.